Domus Aurea

POR QUÉ VISITAR LA DOMUS AUREA?

Las salas que pertenecieron a la Domus Aurea han permanecido hasta nuestros días como testimonio del esplendor alcanzado en la edad de oro del edificio. Cada sala generalmente toma su nombre de los elementos decorativos contenidos en ellas, Por ejemplo, encontramos la "sala de la bóveda de los búhos" (“sala della volta delle civette”), la "sala de la bóveda negra" (“sala della volta nera”) y la más famosa la "sala de la bóveda de oro" (“sala della volta dorata”).
Los pocos fragmentos de elementos pictóricos que han sido encontrados contienen un alto nivel de decoraciones; muchos artistas se inspiraron en las grutas de la Domus Aurea y, algunos de ellos como Raffaello, Ghirlandaio y Pinturicchio, dejaron su firma en memoria de la visita a la villa de Nerón.
Una de las esculturas más famosas encontradas en las excavaciones de la villa, es el grupo de Laoconte que representa el sacrificio extremo del sacerdote y sus hijos y que fueron colocadas para decorar el complejo.

UN POCO DE HISTORIA DE LA DOMUS AUREA

La Domus Aurea fue la villa construida por el emperador romano Nerón después en el 64 d.C. Roma fue devastada por un incendio. Cuando Nerón murió, la villa fue destruida para devolver a los ciudadanos romanos toda esa parte de terreno, la cual el emperador se había apropiado para construir su casa.
De la suntuosa villa quedó tan solo una parte que fue redescubierta casualmente a finales del siglo XV gracias a algunos excursionistas que se adentraron en las cuevas subterráneas, redescubriendo así la pintura antigua y el arte de lo "grotesco".
La villa se extendía sobre una parte de la colina del Palatino, del Oppio, de la Velia y también en parte de la colina del Esquilino. Actualmente, del gran complejo de la Domus Aurea está en la parte del Colle Oppio, que serpentea alrededor de la sala principal en forma octogonal.

QUÉ ES HOY LA DOMUS AUREA?

La parte de la Domus Aurea que no fue destruida después de la muerte de Nerón y que puede verse incluso hoy, es una parte del acueducto llamado Arcus Neroniani, que suministró agua a la Domus Aurea, a una parte de las Termas de Trajano (Terme di Traiano) y a los trabajos del ninfeo de Nerón.
Lo que queda hoy es básicamente un núcleo formado por 150 salas cubiertas por bóvedas de cañón. Del lujo y del esplendor original de la villa quedan estucos y mosaicos, mientras que los frescos que adornan los corredores y las paredes son atribuibles al estilo pompeyano.

CURIOSIDADES DE LA DOMUS AUREA

Sabías que Nerón Claudio César Augusto Germánico fue un emperador romano, el quinto de la dinastía Julio-Claudia que gobernó durante catorce años hasta su muerte a la edad de treinta años. Según la tradición católica, fue Nerón quien ordenó la crucifixión de Pedro.
Sabías que durante su imperio, Nerón hizo construir una enorme estatua de mármol que lo representaba? Fue el escultor Zenodoro quien realizó este coloso de 37 metros de altura que se colocó a la entrada del palacio. Después del siglo V dC la estatua fue demolida por el Papa Gregorio Magno, a quien no le gustó el símbolo pagano representado por el coloso de Nerón.

CÓMO PUEDO VISITAR LA DOMUS AUREA?

La única forma de visitar la Domus Aurea es tomar parte en una visita guiada con horario de inicio fijo. Con este tour podrás descubrir la antigua residencia del Emperador Nerón en todo su esplendor, gracias a las instalaciones multimedia con realidad virtual colocadas a lo largo del recorrido.

OTRAS ATRACCIONES

La ciudad de Roma es un museo al aire libre y visitándola es posible ver las ruinas del magnífico período de la Roma Imperial y sus monumentos famosos en todo el mundo. Siguiendo tu itinerario, con la ayuda del Mapa de Roma, podrás, con un paseo, ver la mayoría de los monumentos romanos.
Comenzando por el Coliseo, el famoso anfiteatro romano donde lucharon los gladiadores y donde se celebraron importantes eventos, se puede llegar al Foro Romano y al Palatino. Continuando la visita podrás seguir tu camino pasando por el Altar de la Patria y cruzando por la Piazza di Campo de' Fiori, donde tiene lugar el mercado típico popular de la ciudad hasta llegar al otro lado del río y visitar Castillo Sant' Angelo. Muy cerca de este castillo está la Ciudad del Vaticano que contiene maravillas artísticas y arquitectónicas como la Capilla Sixtina, la Basílica de San Pedro, los Museos del Vaticano y los Jardines del Vaticano, lugar de relajación y meditación del Papa.
Algunos de los museos que te podemos recomendar durante tu estadía en Roma son aquellos que forman parte del Museo Nacional Romano: Palazzo Massimo, Palazzo Altemps, Cripta Balbi y las Termas di Diocleciano. Otros museos interesantes tanto en el arte antiguo como en las eras más recientes son los Museos Capitolinos y por supuesto la Galería Borghese. Algunos monumentos antiguos que puedes visitar son la Tumba de Cecilia Metella, el sitio arqueológico de Villa dei Quintili y lo que queda del hermoso complejo de las Termas de Caracalla, que era un lugar popular para los antiguos romanos. Puedes continuar tu visita con el Panteón de Agripa y, pasando por la famosa Fuente de Trevi (Fontana di Trevi), podrás llegar al Museo del Ara Pacis. Otro lugar donde puedes encontrar un encanto inusual, son las antiguas Catacumbas de Roma, los monumentos funerarios subterráneos.
Si estás interesado en conocer los lugares de interés en las afueras de Roma, puedes visitar el pueblo de Castel Gandolfo, conocido por ser uno de los pueblos más bellos de Italia, así como la residencia de verano del Papa. No muy lejos de Roma, también se encuentra la Villa d' Este en Tivoli que vale la pena ser visitada por su arquitectura y sus hermosos jardines.

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